FASHION DESIGNER / FASHION MARKETING AND COMMUNICATION

Querido Worth, ¿Qué seria de mi profesión si no se hubiera lanzado a ponerle título a sus sueños? Hoy en medio de toda la información absorbida y tantas conclusiones por delante, me detengo y digo, gracias, gracias por haber tenido la valentía y sobre todo el corazón, para ponerle cara y sello a cada uno de sus ejemplares. Que quizás tal vez, al igual que muchos escépticos, dudo cuantiosamente.

 

Y es obvio, que desde siempre ha existido la mutabilidad en la moda, pero explíqueme usted, esa necesidad absurda de querer representar a pepito de tal; que nos tiene haciendo el papel de memo a los demás, y esos demás a quien sabe cuantos más, en sentido vertical.

 

Como directores de orquestas, cansados de la coección social, surge en su gran época algunas revistas, yo diría que de las más importantes; para proponer un cambio rotundo pero necesario. Inspirar a la sociedad a atreverse a brotar, mediante ilustraciones y diferentes tips, cómo recrear prendas con materiales comunes, pero no corrientes. ¡Y que gran público!, pero que corriente. Otra vez, el público mayoritario acostumbrándose a algo tan innecesario, como el solo hecho de emular lo obvio. Claro y constante, el consumo por quienes consumimos.

 

Las mujeres en Nueva York querían ver en las páginas de las revistas, una moda que pudieran vestir, pero más importante resaltar. Exclusividad, asequibilidad y alta calidad son los pilares que refuerzan los inicios de Harper´s Bazaar, Collier´s Weekly y la evolución de Conde Nast. La bonanza y él despilfarre económico de su momento, combinaban a la perfección con el enfoque y la visión que se pretendía narrar y alcanzar, con las publicaciones de los nuevos libros de imágenes, llamados revistas. Así pues, surge consigo la brillante idea de replicar y replicar con exactitud hasta Dios. Y es aquí cuando reitero que le agradezco eternamente su ingenio, porque sinceramente no hay nada que me dé más rabia y es la gente ladrona, ladrona de horas de sueño, inspiración y neuronas.

 

Después de todo, estas biblias de la moda continúan su función, compartir, informar e inspirar de un lugar a otro. Pues no podría yo, culpar a grandes editores y curadores que a través de diseños, composiciones e información sobre mi mundo, la moda. Nos ayudan a unos cuantos a encontrar el verdadero significado de las cosas. Pues a pesar de usted haber nacido en otro continente y yo en otra época, logró plasmarle al mundo por medio de estas, un gran ejemplo de apropiación y distinción a la sociedad.